Abrimos la exposición con un punto de fuga, una escultura inspirada en las imágenes de los repelentes para perros, transformación del gesto por un hilo de nylon, diversificación de la mirada que deforma en dos sentidos.
Hace usted bien en dudar, quiere decir que observa, que es observado por el animal. Tenga Cuidado.
Alguien pregunta en qué sentido es la violencia de la Efigie, alguien devuelve la pelota. Se trata de la luz, qué demonios sucede cuando la luz es máxima, cuándo el terror es un brazo que se tensa, cuando hay un Hombre con pánico, a mediodía.
Detrás de la luz está la trampa. Detrás de la luz y de las denominaciones.
Por eso han de procurar andárselas con ojo en este espacio donde pueden pasar cosas…, cosas como que el juego de Gesto les coja por sorpresa y ¡zás! los pliegues se aparezcan y las manos (minutos antes hacia el cielo) se trasmuten en orgánica carne.
SINESTESIA
Eres un enormísimo tramposo, Pablo, un enormísimo escultor, muchas gracias por venir a Mineártpolis, los ejércitos de ojos de la polis te dan la bienvenida. Un whisky a tu salud. Esperamos volver a verte pronto por aquí.
4 comentarios:
Chapó Pablo! La efigie es soberbia, estoy deseando ver la manada de rinocerontes y la resolución de su embestida. Ya sé que hago trampa, pero tu inédita Efigie III me ha dado que pensar.
Gracias de nuevo por tu colaboración.
Ha sido un verdadero placer tenerte por aquí.
Bram Stocker
Muchas gracias, Pablo. La mara que está detrás de ese gesto (el de las manos) tiene que ser mucho peor que la salvatrucha.
juan -ng-
encantado! hasta cuando querais!
Ese perro da miedo. Enhorabuena por la exposición. Veo que también tocáis temas de arte... Se nota que hay gente detrás.
Un gélido saludo (por el frío qua hace en Madrid...).
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